Hotel Vapor Gran

Situado en una zona privilegiada tras la remodelación del Vapor Gran en Terrassa, emergía una edificación con uso hotelero. Debía ser un pequeño hito de la zona, y aunque su altura fuese moderada y su forma ya predeterminada, pensamos que precisamente su piel, podía conferirle personalidad de equipamiento. Pero para diseñar la piel, la fachada, siempre nos basamos en el interior, como debe ser, no era un capricho estético sino la expresión de una voluntad interior: poner dos ventanas juntas, pero con dos alturas: una para cuando estás de pie y otra para cuando estás acostado en la cama del hotel. De esta forma surgió la unidad del hueco de fachada dúplice, que al irse combinando convenientemente conforma un puzzle de piezas de hormigón prefabricado. Por eso la gente ha comenzado a llamarlo el “tetris” en referencia a este popular juego donde se trata de ir encajando piezas sin dejar huecos.

A pesar de la difícil planta para uso hotelero, fuimos encajando las habitaciones y se conformó un núcleo central de servicios y ascensores. El volumen queda redondeado en sus aristas para suavizar su impacto sobre el entorno y dejar resbalar la luz. Desde el interior los ventanales curvos crean habitaciones panorámicas espectaculares, así como desde su terraza jacuzzi, situada estratégicamente hacia las naves del Vapor Gran con el mejor asoleo.